Te mentí ,no me llamo Renata ,soy Bárbara te acordas?

Fui la pobre niña en desamparo y te ofrecí mi amistad, te mostré el oscuro infierno, del cual me costó escapar .Yo pensaba que me habías olvidado, sin embargo de mí parte  siempre todos los días te busque una vez más. Mi condenada debilidad, me quiebro en mil pedazos, mientras vos me dejas en soledad, aprendi a odiarte con el tiempo, pero la verdad fue que no me sentí nada mejor, añoro esos días perfectos cuando solo éramos nosotros dos .Ahora decido volver una vez más, vuelvo cuando no lo esperas, esas promesas que me vendiste una vez, ya no sé si las comprare, pero soy consciente que todo puede terminar de una manera, eternamente enamorada de vos. Los huesos fríos que alguna vez deje en el camino, espero un dulce sueño con vos, de tan borracha alguna que otra noche te pensé, nunca tuvimos ningún beso del adiós. En lo personal las cosas nunca estuvieron bien, mientras mi mente era el fuerte apache, mi familia no hacía más que empeorar mi situación y mi padre me repetía una vez que yo no era nada, mi reacción frente a tal ataque era discutir violentamente y encerrarme en mi habitación a llorar mientras miraba mi cara en el espejo, archivé en mi mente grandes ilusiones que pensaba llevar conmigo como tesoros de la vida.
 No tenía ganas de salir ni mucho menos, de todas maneras ante la insistencia de mis amigas decidí salir a dar una vuelta por ahí. Mi copa sangraba alcohol, las estrellas me habían robado todo el brillo, solo tenía un cigarrillo lucky  strike mentolado para disfrutar, lo único que quería hacer era escaparme de esa estúpida realidad, de todas maneras entre toda esa gente no me podía encontrar, estaba perdida en un bar de la ciudad de La Plata no encontraba a mis amigas, y toda la gente que se me acercaba a hablarme no eran más que pesados, chamulleros y babosos. Me fui a la barra y seguía tan sola como siempre, tenía un whisky en la mano, se sabe que no puedo evitar tomar, mientras un tarado que estaba por ahí cerca mío no paraba de sonreírme y hacerme caras estúpidas, se me acercaba lentamente, yo la mas ortiva de todas, no porque realmente sea así, sino porque no tengo ganas de hablar con cualquier tarado que anda por ahí que lo único que busca es que le chupen la pija. De todas maneras este tal fulanito me empezó a hablar, yo tan poco interesada no prestaba atención a lo que me decía, ni escuche su nombre y cuando me pregunto mi nombre le dije: soy Renata. Cuando se acerco finalmente en frente el chico no paraba de decirme te veo la re cara conocida, yo pensaba aaai típico chamullo, sin embargo cuando levanto la vista me di cuenta que estaba más bueno que irse de vacaciones al Caribe un mes y lo peor es que me di cuenta que era mi antiguo compañerito de jardín de infantes del cual siempre estuve enamorada, no lo podía creer, tenían que pasar aproximadamente 15 años para volver a encontrármelo. Encima lo peor del caso es que ahora era tarde para decirle hey si nos conocemos te acordas? teníamos cuatro años, íbamos al jardín juntos. Aaa y me olvidaba no me llamo Renata soy Bárbara Fígoli, si podes agrégame al facebook, te paso mi celular sino, no te hagas problema jajá. Me sentí una boluda total, pero bueno supongo que tengo que aceptar mi fatal destino de estar sola esta noche.
Bárbara Fígoli